NOMBRES PROPIOS HISTORICOS DE SESEÑA
Puesto que en todas las fiestas
se conmemoran las pautas de la vida, los trabajos, aniversarios de santos,
vírgenes, personajes importantes, etc., en un apartado del folleto-programa de
nuestras fiestas vamos a resaltar algunos nombres propios que jalonan la
historia de nuestro pueblo, Seseña. Algunos de estos personajes son tratados hipotéticamente y otros, la
mayoría, han sido extruidos de documentos escritos que se remontan hasta la
Edad Media.
En un documento del rey Alfonso
VIII, de 1181 y 1182, se dice que este rey da al arzobispo Alderico de Sigüenza
unas tierras y un molino harinero en el término de Seseña. El molino harinero y
dichas tierras se situaban cerca de la confluencia del Tajo y Jarama, por lo
que se deduce que Seseña se localizaba en la Vega. Los molinos movidos por las
aguas de los ríos se llamaban “aceñas”,
palabra que árabe es “asanya”. El nombre “asanya” pudo ser el origen del nombre
Seseña, pero existen otras opciones antroponímicas (nombre de personas), como
“Sisius”, “Sisinio”, “Lucio Cornelio Sisenna”,… que enlazan más directamente
con los nombres que tuvo Seseña a partir de los años 1180, como “Sesennia,
Sesenie, Sesenia”.
“Isilus” en germánico quiere
decir hielo, cristal, reluciente. Esta raíz deriva en –inius- y se convierte en
“Sisinius” con el tiempo, por replicaciones y sustituciones lingüísticas. En el
área de Aranjuez y Seseña, hubo poblaciones visigodas con lenguas germánicas,
alemanas, a partir del siglo VI, como demuestran los objetos personales de
bronce encontrados en las necrópolis o cementerios en los términos de estas
localidades. D. Fernando Jiménez de Gregorio propone que el topónimo “Requena”,
área de vega entre Seseña y Borox, procede de un nombre germánico de persona,
“Riikkius”. Menéndez Pidal hace proceder el nombre de Seseña del antropónimo
“Sissius”. Si Seseña procede de “Sisinius” y éste significa “hielo”,
“reluciente”, pudieran estos calificativos referirse a salinas o a las piedras
de yeso cristalizadas en forma de espejuelos relucientes que abundan en nuestra
zona.
Por los años 1080, el rey Alfonso
VI y su amigo árabe, Al-Mamún, rey de Toledo, cazaban en los sotos que había a lo largo del Tajo entre Seseña y
Toledo.
En el testamento de rey Alfonso
VIII, en el año 1204, se hace constar que las salinas de “Las Espartinas” eran
propiedad suya. Este mismo rey da rentas a la Orden de Calatrava sobre las
Salinas Espartinas. La orden tenía propiedades de tierras entre Borox y Seseña.
Espartinas y Seseña eran dos aldeas diferentes ya en el año 1235. En este mismo
año el rey Fernando III manda que se marquen los mojones que separaban los
términos de Espartinas y Salinas. Las autoridades que procedieron a ello se
reunieron en Valdemoro.
Los nobles y señores de Segovia
estaban en pugna con el Concejo de Madrid que les cerraba el paso a sus grandes
rebaños de ovejas que pasaban el otoño e invierno en los valles de los Montes
de Toledo y Ciudad Real.
Amenazaron al rey Alfonso VIII y
lograron cañadas y tierras ganaderas en el término de Seseña. Probablemente
controlaron el puente de barcas de Añover para pasar el ganado a la otra orilla
del Tajo. De esta manera, Seseña pasó a depender del Concejo de Segovia, hecho
que quedó confirmado cuando nuestro pueblo pasó al Señorío de los Arias Dávila,
Conde de Puñoenrostro, que recibió del rey Juan II el Castillo del Puñoenrostro
ubicado en Seseña. La donación fue confirmada después por el rey Enrique IV.
Para atender las necesidades del
castillo, de su guarnición militar y servicio económico doméstico, se invitó a
agricultores, granjeros artesanos a que
vinieran a vivir a Seseña. Entre los años 1443 y 1450, Seseña incrementó la
población notablemente en torno a la dinámica que exigía un castillo señorial
militar y, a la vez, de esparcimiento y lugar de cacerías.
En 1517 estuvo Seseña el hijo de
Cristóbal Colón, Fernando Colón. En el libro que escribió llamado “Cosmografía”
dice que Seseña dista de Toledo una legua, es decir, unos cinco Kilómetros y
seiscientos metros. También dice que Seseña dista esta misma distancia del
Castillo de Puñoenrostro. Seria apasionante indagar tales discordancias y si
fueron escritas desde el despacho o tomando nota a pie de camino.
Entre los años 1721 y 1831 Seseña
figuraba en documentos que están guardados en el Archivo Histórico Nacional.
Uno de ellos trata sobre la paga que debía recibir el maestro de Primeras
letras, don Juan Alconero. En otro documento sobre arriendo de tierras figuran
los nombres de Francisco Correas, José Gómez Sánchez y José González Marín, vecinos
de Seseña.
Actualmente los apellidos
Alconero, Correa, Sánchez y González, los encontramos entre numerosos
seseñeros. Los apellidos Arias, de Hita, Mejía, constan desde el siglo XVI en
Esquivias y posiblemente en Seseña también.
En la Guerra por la Independencia con Francia, destacó en
esta zona toledana y madrileña un
jefe de partida de guerrillero llamado “El Viejo de Seseña”.
Luchaba unido a Juan Palarea, jefe
de la partida “El Médico”. Entró en Valdemoro quitando a los
franceses un cuantiosos botín
armas. “El Viejo de Seseña” fue el primero que entró en
Toledo el día 14 de agosto de 1812,
tras la evacuación precipitada de los franceses de la ciudad.
Después entrarían las partidas de
“El Médico” y “El Comisario”.
En Seseña quedan dos nombres que creemos que se refieren al
Viejo de Seseña. “El camino
Huerta del Abuelo” y la “Huerta del Abuelo” que se sitúa en
la Vega, cerca de la Cuesta De la
Reina. Durante la guerra
de la Independencia los franceses ocuparon Seseña y tomaron
posiciones claves en el Puente Largo, Cuesta de la Reina,
accesos a Toledo, Madrid y Andalucía.
En las inmediaciones de la Cuesta de la Reina debió librarse
una batalla entre franceses y
españoles ya que (según comunicaciones orales),han aparecido
bayonetas, cascos, hebillas,
botones, etc., encontrados por aficionados que utilizan los
detectores de metales.
Quedan aun centenares de datos prehistóricos e históricos que
llenarían un libro y que bien
merecería la pena ser plasmados impresa y gráficamente, por
ello os emplazamos a próximos
artículos.
Los datos de fechas y nombres propios del presente trabajo, han sido
tomados de la
conferencia que D. Fernando Jiménez de Gregorio dio años atrás en la
Casa de la Cultura de
Seseña. Aprovechamos la ocasión para rendirle un sencillo pero sentido
homenaje a tan
ilustre historiador toledano.
DOMINGO IZQUIERDO MEDINA
ARTICULO
RECOGIDO EN EL LIBRO FIESTAS EN
“HONOR VIRGEN
DE LA ASUNCION”.SESEÑA.2005